Actualmente, las estrategias, sistemas y procedimientos enfocados en la gestión de empresas se han convertido en herramientas fundamentales de su crecimiento. Según el Informe BPTrends de 2018, el 93 % de las empresas están involucradas en múltiples esfuerzos para mejorar sus procesos. Con la ayuda de la tecnología actual, el campo de los negocios ha conseguido avances significativos para su crecimiento. Estas herramientas tecnológicas son de naturaleza múltiple, pero las dos opciones principales que las organizaciones tienen en cuenta para su mejora son el ERP (gestión de recursos empresariales) y el BPM (gestión de procesos del negocio).
ERP y BPM son herramientas que comparten un objetivo común, mejorar la productividad y aumentar las ganancias. Pero, a pesar de que tienen objetivos comunes y un funcionamiento similar, existen diferencias puntuales que deben llevar a las empresas a, según sus objetivos, escoger cual es la tecnología que más se amolde a sus necesidades. A continuación, haremos una comparación entre BPM y ERP para señalar cuales son estas diferencias claves.
Definiendo estos sistemas de gestión
La planificación de recursos empresariales (ERP) es un tipo de software que proporciona a los usuarios acceso a un conjunto de aplicaciones a través de módulos que se construyen teniendo en cuenta las principales funciones comerciales, como recursos humanos, contabilidad, gestión de inventario entre otras. La característica principal de un sistema ERP es su capacidad para almacenar y extraer datos de una base de datos común, lo que permite una única fuente de acceso a la información.
Por otra parte, un sistema BPM (gestión de procesos del negocio) es una herramienta que permite a la empresa administrar sus flujos de trabajo con un alto nivel de personalización y eficacia. Este se compone de estrategias y técnicas utilizadas para comprender, mejorar y automatizar los procesos de negocio. BPM ve los procesos como recursos en sí mismos y busca mejorarlos.
Ambos están relacionados con la inteligencia empresarial ya que ayudan a los profesionales de negocios con la gestión y las mejoras de su negocio.
Diferencias entre BPM y ERP
Muchos de los profesionales de negocios confunden ambos sistemas entre sí o también con sus trabajos designados. Para hacer un mejor uso, es necesario comprender sus diferencias integrales y luego elegir la más adecuada.
Objetivos centrales de ambas herramientas (ERP y BPM)
La gestión de procesos de negocio se trata de comprender y dar una visión clara sobre los procesos de negocio y su gestión total. El sistema ayuda a personalizar, mejorar, implementar y automatizar los procesos comerciales utilizando tecnología y adaptándose a cada necesidad especifica de la organización. Por otro lado, el software ERP se trata de la ubicación práctica de múltiples componentes comerciales. Busca planificar y administrar los recursos comerciales en el momento y en el lugar adecuado. Se centra en los módulos y funciones de la empresa además de que ayuda en sus flujos de trabajo.
Módulo de flujo de trabajo y personalización
Un ERP proporciona un módulo para un flujo de trabajo específico, como contabilidad o recursos humanos, pero no te informará sobre su gestión, personalización o implantación. Mientras tanto, un BPM proporciona información sobre los tiempos de ejecución de los procesos, los estados de desarrollo, la cantidad de procesos cerrados y la cantidad de los que todavía se encuentran abiertos.
Visibilidad y almacenamiento de datos
Aunque ambos sistemas están basados en tecnología y son el resultado de la innovación para la gestión de empresas; pero BPM no puede proporcionar datos visibles en absoluto. Esta es una parte teórica del soporte empresarial que da pautas sobre cómo trabajar los procesos. Mientras que ERP ofrece la oportunidad de tener los datos visibles y almacenados de manera accesible. Proporciona a las organizaciones cifras y números que ayudan a evaluar los valores finales de cualquier dato después del procesamiento.
¿Ambos sistemas pueden implementarse juntos?
Dependiendo de las necesidades de cada empresa, ellas deben tomar la decisión de cual sistema es el que va a sumarle más valor a sus operaciones. Pero ambos sistemas, si se integran correctamente, pueden complementarse entre sí y reducir los vacíos de todas las operaciones de la empresa. Se puede lograr una gestión de procesos automatizada que supervise el uso de recursos y asigne tareas y al mismo tiempo, almacenar todos sus datos de manera centralizada y accesible para todas las áreas de la organización.
Ambos sistemas generan grandes beneficios para las empresas, pero depende de ellas elegir cual se acomoda mejor a sus necesidades. Y tú ¿Cuál eliges?